Dos mujeres corriendo en la playa Picasso 1922 |
La toma de
consciencia de que la realización de deportes que impliquen saltos, impactos,
frenadas bruscas, o carga de pesos (carrera, aerobic, baloncesto,
halterofilia...) es un factor de riesgo para tener incontinencia urinaria y/o
de gases y/o fecal y/o prolapso genital, es básica para poder realizar
prevención adaptando el entrenamiento y la propia práctica. Esto debe ser
especialmente importante para las mujeres que ya tengan pérdidas o síntomas de
prolapso o para las que acumulen otros factores de riesgo.
Empecemos por el principio,
¿de qué estamos hablando?
La incontinencia urinaria es cualquier
pérdida involuntaria de orina. Se da más en la mujer que el hombre por su
anatomía y características físicas. La incontinencia urinaria de esfuerzo es el
tipo más frecuente, y es aquella pérdida
que se produce al realizar un esfuerzo, estornudar o toser. Con fisioterapia se
recupera la funcionalidad muscular para la correcta contención.
La incontinencia de gases o fecal es
cualquier pérdida involuntaria de gases o heces. Con fisioterapia puede trabajarse
las incontinencias funcionales (de origen rectal por alteración de la
sensibilidad o origen anal por alteración de los esfínteres musculares).
El prolapso genital es el descenso
de una parte o víscera a través de la vagina, que inicialmente es asintomático
o bien se nota un bulto o pesadez. Es una afectación más frecuente entre las mujeres mayores. Con
fisioterapia puede corregirse un prolapso leve y mejorar uno moderado; si es
mayor su solución es ya quirúrgica.
El principal
factor de riesgo de estas afectaciones es el embarazo y el parto vaginal, pero
otro factor a tener en cuenta es la realización
de prácticas deportivas de impacto. Además de esto, influyen los casos
previos en la familia, obesidad, diabetes, enfermedades neurológicas o respiratorias,
factores físicos y posturales, intervenciones quirúrgicas en la zona,
estreñimiento...
Estas prácticas
generan estrés de todas las estructuras musculares y conjuntivas pélvicas y perineales
debido a los impactos, así como fuertes presiones en la cavidad
abdómino-pélvica que también han de ser contrarrestadas por las mismas
estructuras. El efecto percutivo que
daña el suelo pélvico y que favorece la hipotonía muscular, se agrava ante las alteraciones posturales como una lordosis
excesiva o la hipotonía de la faja
abdominal.
Y hay que tener en cuenta que un suelo pélvico
dañado repercute en todas sus funciones: micción, defecación, continencia,
relaciones sexuales, sujeción de vísceras pélvicas, parto y estabilidad lumbar.
Pasemos a la práctica, ¿cómo
se ha de adaptar del entrenamiento para hacer prevención?
Algunas ideas -que
no pretenden ser excluyentes ni exclusivas-:
-
Mejorar el tono de la cincha abdominal y suelo pélvico, para lo que recomiendo la práctica de la Gimnasia Abdominal hipopresiva (M.Caufriez)
- Revisar el suelo pélvico con un fisioterapeuta especializado, que ha de valorar si existe el tono y la fuerza adecuada y mejorarlo si es preciso, que ha de garantizar que se realiza una contracción correcta, y de forma más específica, enseñar a realizar contracción perineal antes del esfuerzo deportivo para contrarrestar el efecto del impacto.
- En deportes con carreras, saltos o levantamiento de pesos, usar dispositivos intravaginales tipo paraguas (se despliegan una vez dentro) para prevenir el descenso de órganos. Como hay 3 tallas, es mejor pedir consejo a un fisioterapeuta especializado sobre cual usar.
- Si no hay más remedio que realizar abdominales clásicas, adaptarlas llevándolas a cabo en espiración, realizando una contracción previa no máxima del suelo pélvico, teniendo los pies apoyados y flexionar muy poco el tronco apenas levantando los hombros.
Disfruta del deporte pero con consciencia de
tu suelo pélvico, porque cuidarte ahora es estar mejor hoy y mañana!!
Evidencia científica:
Caetano AS, Tavares
MCGCF, Lopes MHB. Urinary incontinence and physical activity practice. Rev
Bras Med Esporte Jul Ago
2007; 13 (4): 245-8. http://www.scielo.br/pdf/rbme/v13n4/en_12.pdf
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